El poder de WhatsApp como herramienta de comunicación política

El poder de WhatsApp como herramienta de comunicación política

El poder de WhatsApp reside fundamentalmente en que llega a mucha más gente que la comunicación en redes sociales, pero, además, al mismo tiempo facilita su difusión sin ningún tipo de control ni réplica.

La plataforma de mensajes entre teléfonos inteligentes o smartphones se ha convertido en una poderosa herramienta de propaganda política.

El poder de WhatsApp

Manuel Mariscal, responsable de la estrategia digital de Vox, afirma que “ya nadie lee periódicos, la gente ve Netflix y se informa por WhatsApp… Ni siquiera por Twitter lo hace y el fontanero o mi abuela no usan las redes sociales, pero sí WhatsApp”.

En el año 2015, Antoni Gutiérrez-Rubí, asesor en comunicación política, publicó su libro “La política en tiempos de WhatsApp”, en el que ya anticipaba el enorme potencial de una herramienta que en esos momentos despreciaban la mayor parte de los partidos políticos, ya que estaban obsesionados con ser trending topic en Twitter o en acumular muchos amigos en Facebook.

“Las redes sociales son un terreno más propicio para la comunicación o la interacción política, pero WhatsApp es un terreno muy fértil para la propaganda y ese se constituye en el gran cambio”, explica Gutiérrez-Rubí.

“WhatsApp permite llegar a los teléfonos móviles en una plataforma de amplísima difusión, prácticamente el 100%, con unos niveles de descentralización extraordinariamente difíciles de controlar”.

WhatsApp y las noticias falsas

La BBC presentó en el mes de noviembre del 2018 un proyecto de investigación que desarrolló en la India, Kenia y Nigeria, donde se analizó cómo se difunden las noticias falsas en aplicaciones de chat cifradas como WhatsApp.

Sorprendentemente, su principal conclusión fue que detrás de esa viralidad hay siempre un componente “emocional” y que el impulso principal es un sentimiento nacionalista.

En la India, donde se cuentan más de 200 millones de usuarios de WhatsApp, se comparten innumerable cantidad de noticias falsas que incluyen mensajes nacionalistas con el propósito de “construir una nación”, y es en ese terreno donde se prioriza la consolidación de la identidad nacional ante la necesidad de verificar los hechos.

Según Jamie Angus, Director de BBC World Service Group, “está surgiendo una serie de problemas graves en el mundo, no solo en occidente, por los que la idea de construir una nación está triunfando sobre la verdad”.

La BBC ha detectado en Nueva Deli y Nairobi estos comportamientos, y en Brasil se han detectado mensajes fraudulentos que dieron impulso a la última campaña electoral. En España, WhatsApp se ha convertido en una potente arma de propaganda, tanto en el proceso catalán como en la expansión de Vox.

WhatsApp y su fórmula trasladable

La fórmula que ofrece WhatsApp es trasladable a cualquier partido político que tenga un contenido de naturaleza similar a la propaganda que estimula la pasión, las emociones fuertes, sea nacionalista o no, agrega Gutiérrez-Rubí, “WhatsApp es un canal ideal para alimentar día a día, gota a gota, las auto convicciones y los prejuicios de la gente”.

El Instituto Reuters de la Universidad de Oxford, en su informe Digital News Report, asegura que el uso de WhatsApp para el consumo de la información se ha duplicado en los últimos cinco años. Este hecho coincide con la crisis de Facebook y el desplome de la prensa de esa época. Según este informe, más de un tercio de los españoles emplea la aplicación WhatsApp como principal fuente de información.

Para las personas mayores de 65 años, la televisión sigue siendo su principal fuente de información, sin embargo, para quienes tienen entre 18 y 40 años el consumo de los medios es totalmente diferente.

En el año 2018 y por primera vez en la historia, la televisión ha dejado de ser la primera fuente de información masiva, dice Verónica Fumanal, experta en mercadeo político, porque la gente se informa por redes sociales, Internet y especialmente por WhatsApp, “que es en donde está todo el mundo”.